I+D en la industria de la celulosa y el papel
Gloria Bravo
Directora Biotecnológica Arauco SPA
Es indiscutible que la industria de la celulosa y el papel en Chile es un sector clave para la economía del país, destacando su capacidad de producción y su importancia en las exportaciones. Esta industria enfrenta hoy una serie de desafíos en distintos ámbitos, pero también oportunidades.
En el contexto de los desafíos, destacan en términos generales, el desarrollo de nuevas capacidades productivas, sostenibilidad y eficiencia. Se suma a éstos la transformación digital y automatización asociada al uso y análisis de datos e inteligencia artificial. Siendo esta industria uno de los mayores consumidores de energía, contribuyendo significativamente a las emisiones y consumo de recursos naturales, queda mucho por hacer en términos de una transformación profunda en los procesos productivos y una inversión significativa en tecnologías más limpias e inteligentes.
Se requiere, además, innovar en productos con potencial efectivo de reciclaje, más allá del desarrollo de infraestructura y procesos, en sintonía con la tendencia de mercado y consumidores. Además, está el desafío de integrarse a las tendencias en economía circular y nuevas aplicaciones tecnológicas y uso. Esto representa una oportunidad, la cual requiere de inversiones significativas en investigación y desarrollo (I+D). En términos económicamente estructurales, esta industria ha sido motor del desarrollo de proveedores locales, los que aportan en sus objetivos productivos. Pero hoy es necesario crecer en el desarrollo de otro tipo de economía local, basada en investigación, conocimiento e innovación, fomentando la creación centrada en nuevos productos, procesos y servicios.
En este contexto, la industria de la celulosa y el papel puede incentivar y promover el desarrollo de empresas de base tecnológica, con un enfoque renovado basado en I+D, centrado en el desarrollo de nuevos productos, como la celulosa textil y derivados, alternativa sostenible a las fibras sintéticas y que promueven el desarrollo de otras industrias con nuevas vocaciones productivas.
La industria de la celulosa, tradicionalmente asociada con la producción de papel y cartón se potencia como una industria clave en el desarrollo de nuevos materias y aplicaciones. Geles, nanocelulosa, insumos biomédicos y electrónicos, materiales sustitutos del plástico y para embalaje, abren la posibilidad de crear empresas que pueden aportar significativamente en la reactivación económica local y su transformación.
Con este horizonte como objetivo, resulta fundamental la colaboración entre el sector productivo, universidades e instituciones basadas en actividad de I+D, que además sepan incorporar la experiencia global de empresas que lideran la industria a nivel mundial y que en las últimas décadas han apostado por la inversión en conocimiento, contribuyendo al desarrollo económico sostenible y su diversificación productiva.